Texto XII
No eras la reina en la tarde
Eras danza sin mirar
Eras los peces en mi rio
Eras ganas de despertar
Te vestiste de día muriendo
Era la tela el último sol
Era el brillo en las hojas muertas
Era el golpe en mi sopor
No necesité escucharte
No tuve que verte cantar
Me basto descubrir tu rostro
Que el tiempo va a borrar
No supe cual es tu nombre
Y con ello me duele el alma
Sin forzar me diste la vista
Solo eso lleve a mi
cama
No volveré a ver tus ojos
Que eran la puerta abierta
Ay el miedo de siempre
En mi cabeza inexperta
Eras la reina en mi tarde
Y ya solo podré recordar
Tus muecas, tus burlas y gracias
Una historia que no va a empezar
El de pantalones rayados, y asi misma esta su razón.
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